jueves, 3 de marzo de 2011

Apto "sólo sin competencia"


Un amigo me contó hace unos días de su interés para presentarse a cierto trabajo. El trabajo era como ayudante de docencia en la Facultad donde estudiamos. Con toda la ilusión, retiró las planillas y formularios para presentarse a concursar por el puesto, y para mejorar las cosas, decidió ir a presentarse a la oficina de su futuro empleador. Le comentó de su intención, y siendo un alumno aplicado, le explicó de su disponibilidad horaria comprometida, aclarando que estaba totalmente predispuesto a cubrir horas que le faltaran en cualquier horario de la semana necesario para cumplir las condiciones del contrato. Este tipo de arreglo en las horas de trabajo, vale aclarar, es muy frecuente en dicho puesto, dado que generalmente se le da a alumnos con un buen desempeño académico que, paradójicamente, carecen de mucho tiempo disponible para otras actividades, pero que por su actitud son aptos para la docencia.
Frente a toda la humildad y predisposición de mi amigo al ir a presentarse, la respuesta del "profesional", experto en el tema y docente hace ya muchos años, fue la siguiente: "De la única forma de que vos ganes ese concurso es que seas el único que se presente". Sin palabras...o con muchas. Esta es la gente que tiene como función, como docente y como experto en su materia, dar el primer empujón a nosotros, a todos los que recién salimos del cascarón y nos enfrentamos a tener que, de un día para el otro, aplicar todo lo que aprendimos y aprender lo que no sabemos; actuar como adultos, curtirnos ante las decepciones y darnos contra la pared. Pero... con qué entusiasmo de principiante puede arrancar uno, si quien tiene las herramientas para ayudarlo a empezar, en vez de darle la mano le tira al fondo del pozo?
Tal vez solamente fue falta de sensibilidad, sin ninguna intención de tirar abajo su ilusión. Pero el tacto y la empatía para con los que todavía no despegaron, creo yo, que es el primer paso para forjar buenos profesionales para el futuro.
Mi amigo va a conseguir otro trabajo, y probablemente termine aprendiendo a los golpes, como hacemos todos. Pero aunque a su manera logre encontrar el rumbo y sea feliz, no es necesario por parte de quienes nos guían agregar más obstáculos. La inexperiencia y el miedo ya son bastante por sí solos.

2 comentarios:

  1. excelente blog!!! te re felicito

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  2. Golpes, injusticias, siempre las habra y mas vale recibirlas desde temprano para ir templando el caracter! besos!!! este es un comentario de prueba, cortito y al pie, no como el kilometrico que escribi y se acaba de borrar!

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